SÍNDROME DE ALCOHOLISMO FETAL
El síndrome alcohólico fetal, SAF, (Bertrand, 2004) es una combinación de anomalías craneofaciales y cerebrales, así como alteraciones en el crecimiento, disfunciones neurológicos y déficits cognitivos.
Últimos estudios han demostrado que el atracón de alcohol de la madre durante el embarazo produce niveles más altos de alcohol en sangre que son más dañinos para el feto que la exposición crónica.
Es una combinación de anomalías craneofaciales y cerebrales, así como alteraciones en el crecimiento, disfunciones neurológicos y déficits cognitivos
Síntomas del Síndrome de Alcoholismo Fetal:
Bajo peso al nacer
Menor perímetro craneal
Retraso del crecimiento
Retraso del desarrollo
Disfunción orgánica
Anomalías faciales, incluyendo ojos de tamaño inferior al normal, mejillas aplanadas y surco nasolabial poco desarrollado
Epilepsia
Problemas de coordinación y de motricidad fina
Escasas habilidades sociales, incluyendo dificultad para establecer y mantener vínculos de amistad y para relacionarse en grupo
Falta de imaginación o curiosidad
Dificultades de aprendizaje, incluyendo poca memoria, incapacidad para entender conceptos como el tiempo y el dinero, deficiente comprensión lingüística y escasa capacidad de resolución de problemas
Problemas de comportamiento, como hiperactividad, incapacidad para concentrarse, retraimiento social, testarudez, impulsividad y ansiedad.
Los niños con trastorno del espectro alcohólico a menudo no se les hace un diagnóstico adecuado
Estos problemas se intensifican según crece el niño y se acerca a la edad adulta, apareciendo problemas relacionados con salud mental o con la incapacidad de vivir de forma independiente.
A los niños con trastorno del espectro alcohólico a menudo no se les hace un diagnóstico adecuado.
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